Condena de la represión en Serbia y petición de una investigación sobre la tragedia de Novi Sad

La resolución responsabiliza políticamente a los dirigentes serbios de la escalada de violencia y el debilitamiento de la democracia. El Parlamento exige que se investigue de forma transparente la tragedia en la que se derrumbó una estructura en la estación de tren de Novi Sad y se lleve a los responsables ante la justicia.

Los eurodiputados también apoyaron el derecho de estudiantes y ciudadanos a protestar pacíficamente y criticaron la represión violenta, las detenciones y el uso de tecnologías de vigilancia como el programa espía Pegasus. Según la resolución, las autoridades serbias son responsables de normalizar la violencia, difundir campañas de odio y propaganda contra la UE.

El Parlamento advierte de que las últimas elecciones en Serbia se celebraron en condiciones injustas, con presiones a los votantes y compra de votos. Por ello, pide que se apliquen plenamente las recomendaciones de la OSCE, incluida una auditoría independiente del censo electoral y que se garantice la igualdad de acceso de los partidos políticos a los medios de comunicación.

A pesar de las críticas, el Parlamento ha confirmado que apoya la perspectiva europea de Serbia, pero sólo a condición de que se produzcan avances mensurables en los ámbitos de la democracia, el Estado de Derecho y el respeto de los derechos fundamentales. El texto también acoge con satisfacción el nuevo tono, más realista, de la Presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, durante su reciente visita a Serbia.

La resolución incluye un llamamiento para que una misión de investigación de la UE, con la participación del Parlamento Europeo, evalúe sobre el terreno el estado de la democracia, el curso de las protestas y el nivel de represión contra los implicados.